Mi consejo personal. Mudarme al extranjero empezó con un vuelo relámpago a Barcelona en una fría y miserable tarde de enero. Sin trabajo, sin alojamiento permanente y sin amigos esperándome en mi nuevo destino, me sentía muy aprensiva y muy sola. Pero a la mañana siguiente me desperté con un sol invernal (un milagro para un escocés) y empecé a sentirme mejor. Era hora de salir de la cama y empezar una nueva vida. He aquí cómo lo hice.
Alojamiento
Consejo número uno para mudarse al extranjero: organiza un alojamiento temporal para cuando llegues. Por ejemplo, yo alquilé una habitación en un apartamento durante un mes, lo que me proporcionó un poco de seguridad para mi llegada. Además, me dio tiempo para buscar un lugar permanente. Recuerda investigar un poco sobre precios y procesos. Y, sobre todo, nunca pagues dinero por adelantado sin ver antes el piso. Un amigo mío pagó un “depósito” de varios centenares de euros por un piso que sólo había visto en fotos anunciadas en Internet. Desafortunadamente nunca volvió a ver el piso ni la fianza.
“Entonces llega el fin de semana y te das cuenta de que… ¡tu agenda social está abierta de par en par!”.
Burocracia
Cosas como la seguridad social, los números de la seguridad social, las tarjetas sanitarias y las cuentas bancarias son esenciales para mudarse al extranjero. Además, es probable que la mayoría de las empresas insistan en que tengas los papeles en regla antes de contratarte, así que intenta hacer todo lo posible antes de mudarte. Hay muchos recursos para ayudarte en Internet, desde sitios web oficiales del gobierno hasta grupos de redes sociales. Para mí, las guías más útiles fueron otras personas que habían pasado por una experiencia similar recientemente.
Trabajo
Una vez que puedas trabajar legalmente en tu nuevo país, querrás empezar a buscar trabajo. Descubrí que las empresas básicamente ignoraban mis solicitudes mientras aún vivía en otro país. Sin embargo, cuando volví a ponerme en contacto con ellas para decirles que ahora era residente local, obtuve mucho más interés y llamadas para entrevistas de trabajo. Intenta encontrar una forma de comunicar tus nuevas circunstancias cuando finalmente te traslades al extranjero.
Amigos
Así que ya tienes tu piso, tu papeleo, tu nuevo trabajo. Entonces llega el fin de semana y te das cuenta de que… ¡tu agenda social está abierta de par en par! Mi consejo en esta situación es que seas proactiva. Proponte oportunidades para socializar, como tomar algo después del trabajo con los compañeros, clases de idiomas o grupos de encuentro para personas con intereses similares. Por supuesto, también es muy posible que hagas amigos por pura casualidad. Yo conocí a mi mejor amiga esperando en la cola del banco, si te lo puedes creer.
Just do it
No, no estoy vendiendo material deportivo. Lo que quiero decir es que nunca es el momento perfecto para hacer un acto que te cambie la vida: ¡yo me mudé a un nuevo país en pleno invierno con sólo 300€ en mi cuenta bancaria! Pero si quieres hacer que funcione, harás que funcione. Deja de quedarte atrás y lánzate a mudarte al extranjero.
¿Quieres ir más lejos?
